lunes, 21 de enero de 2019

Ámsterdam, los canales y sus aves.

El pasado mes de diciembre visité la ciudad de Ámsterdam, en los Países Bajos, así como algunos pueblos cercanos a esta capital. El viaje fue con mi mujer, como escapada romántica, pero pronto se convirtió en una ruta pajarera, y todo eso debido a la gran riqueza de aves de la zona; digamos que tengo poca fuerza de voluntad para huir de la tentación...



Lo primero agradecer a Elba, mi chica, la increíble paciencia que tuvo mientras ella intentaba ver la ciudad y yo perseguía todo lo que aleteaba.

He de decir que, a parte de las aves, hablamos de una ciudad preciosa, muy peculiar, con una arquitectura propia y sorprendente, además de los famosos canales que horadan la zona y sobre los que reposan infinidad de casas-barco que añaden encanto a la ya de por si maravillosa capital. Está también el Barrio Rojo, muy llamativo albergando todo aquello que la legislación neerlandesa ha permitido y que en el resto de países nos provoca un sonrojo cuanto menos. Y ya las zonas rurales de la periferia son de cuento, con los molinos, las grandes queserías y los prados infinitos.

Por supuesto no podríamos hablar de Ámsterdam sin mencionar la infinidad de bicicletas que hay, más que habitantes, y tienen completamente tomada la ciudad. Si has visitado esta capital y no has estado apunto de ser atropellado por un ciclo, te ha faltado una de las más típicas tradiciones amsterdamers.



Pero vamos a lo que nos interesa, nuestros afables emplumados, y en eso la capital holandesa no se queda atrás, pues pude disfrutar de unas 30 especies diferentes entre Ámsterdam y pueblos cercanos (Volendam, Marken, Edam y Zaanse Schans), muchas de ellas son un BIMBO para mi, además de ser tremendamente urbanas y numerosas. Importante también saber la meteorología sufrida aquellos días, con temperaturas desde los 0º grados del primer día hasta un máximo de 6º; y desde una nevada que tiñó de blanco el perfil de la ciudad nada más llegar, pasando por momentos de calma nubosa y pequeñas lluvias que no fueron nunca de carácter importante.

Separaré las especies vistas en tres grupos según las zonas de observación: Ámsterdam (urbanas), Edam-Zaanse Schans (Rurales) y Volendam-Marken (Costeras)


Ámsterdam, canales emplumados.

Comenzamos por la capital, donde pude observar nada más llegar un ingente número de gaviotas (reidoras y argénteas), así como infinidad de grajillas. En los canales abundaban también las fochas y cisnes, así como los ánades reales. Además visité el parque Vondelpark, un inmenso vergel salpicado de lagos y bosquetes donde ver una buena variedad de especies.

Decir que las aves observadas aquí eran, en muchos casos, tremendamente atrevidas y confiadas, dándome la oportunidad de acercarme bastante más de lo que haría en otras situaciones.

Las especies observadas fueron: Ánade azulón (Anas platyrhynchos), Carbonero común (Parus major), Cisne vulgar (Cygnus olor), Cormorán grande (Phalacrocorax carbo), Corneja negra (Corvus corone), Cotorra de Kramer (Psittacula krameri), Cotorra alejandrina (Psittacula eupatria), Estornino pinto (Sturnus vulgaris), Focha común (Fulica atra), Gallineta común (Gallinula chloropus), Ganso del Nilo (Alopochen aegyptiaca), Garceta común (Egretta garzetta), Garza real (Ardea cinerea), Gaviota argéntea europea (Larus argentatus argentatus), Gaviota reidora (Croicocephalus ridibundus), Gorrión común (Passer domesticus), Grajilla occidental (Corvus monedula ssp spermologus), Mirlo común (Turdus merula), Paloma bravía (Columba livia), Paloma torcaz (Columba palumbus), Somormujo lavanco (Podiceps cristatus), Tórtola turca (Streptopelia decaocto), Trepador azul (Sitta europaea ssp caesia) y Urraca común (Pica pica)


Ánade azulón (Anas platyrhynchos)

Muy numerosos, tanto en los canales como en el parque Vondelpark.

Pareja de azulones con focha al fondo.

Hembra de azulón donde se ve claramente el "espejuelo" que les da nombre.

Curiosa manera de conseguir alimento, con una zambullida dejando fuera su rizada cola.

Macho de Ánade azulón.

Hembra de Ánade azulón.


Cisne vulgar (Cygnus olor)

Pude observar varios ejemplares, no en gran número pero si relativamente frecuente y todos en los canales tanto de Ámsterdam como de los distintos pueblos. Es un ave muy territorial, por lo que en ocasiones, pese a su belleza, ornamentar con estos emplumados puede ocasionar una importante pérdida de biodiversidad, pues suelen echar a todo ser vivo (sobre todo anátidas) de sus charcas o canales.

Juvenil de Cisne vulgar.

Adulto de esta misma especie.

Para identificar este cisne de otros como el cantor o el chico cabe destacar la protuberancia negra sobre el pico así como toda la máscara que la precede, característica de esta especie y ausente en las demás.


Corneja negra (Corvus corone)

Pocos ejemplares pero confiados, tanto en parques como en pequeños jardines urbanos. De mayor tamaño que las grajillas.





Cotorra alejandrina (Psittacula eupatria)

Curiosa ave invasora procedente del sur de Asia, muy parecida a la Cotorra de Kramer pero de mayor tamaño y no muestra el collar negro en el cuello. La forma más clara de diferenciarla es por un tono rojizo que presenta en la zona de los hombros.




Ganso del Nilo (Alopochen aegyptiaca)

Otro invasor de enrome belleza, introducido antaño, ahora cuenta con varias parejas establecidas por la zona. Es un ánsar de gran tamaño y al igual que los cisnes muy territorial.









Garza real (Ardea cinerea)

Ardeida de gran tamaño, muy extendida y común por toda Europa y norte de África. En Ámsterdam y los pueblos cercanos era tremendamente atrevida y no dudaba en pasear por las calles en busca de cualquier bocado que llevarse a la boca.

Encongida con el frío de la mañana en el parque Vondelpark.

La reina de Ámsterdam.



Gaviota argéntea europea (Larus argentatus Ssp argentatus)

Gaviota grande, similar a la Patiamarilla pero con las patas rosáceas y un cierto barrado en la cabeza que recuerda a la Sombría. De latitudes más frías, en España pueden verse en la cornisa cantábrica en invierno.

Juvenil de 1º invierno.

Ejemplar adulto.


En este caso, las Argénteas observados pertenecen a la subespecie argentatus, procedente del norte de Europa, y que viajan hacía el sur en la época invernal. En los Paises Bajos, reside también al subespecie argenteus, de la costa oeste el continente.

Cuadro explicativo de diferencias entre subespecies - © Guía de Aves | Mullarney & Svensson.

La diferencia reside, como se ilustra en la imagen superior, en las "manchas blancas" de la cola, que vienen a ser las puntas de las plumas primarias cuando están recogidas; siendo más anchas y notorias en la argentatus que en la argenteus, además de ser algo más oscuras y de mayor tamaño.


Gaviota reidora (Croicocephalus ridibundus)

Sin duda el ave más común de la ciudad, presente en cada canal, estanque o parque. Una vez más, presentaba una actitud atrevida, además de un comportamiento ruidoso e incluso agresivo, quitando comida a los turistas prácticamente de las manos.



A continuación en este artículo, compartiré más fotos realizadas en Volendam, donde pude acercarme bastante a esta hermosa especie.


Grajilla occidental (Corvus monedula ssp spermologus)

Junto con la Reidora, es la especie que más se dejaba ver, con su rebotante graznido y esos ojos azules, no dejaba a nadie impasible, y menos a mi, poco acostumbrado a verlas tan cerca. Se trata de un córvido de pequeño tamaño y de alimentación herbívora, que además se ha demostrado que posee una enorme inteligencia, como todos los miembros de su familia.


En esta imagen podemos observar la membrana nictitante del ojo, independiente del párpado y que les sirve como protección.


Mirlo común (Turdus merula)

Este común emplumado de nuestros parques y jardines estaba, como no, presente en esta hermosa ciudad, siendo muy numeroso en el parque Vondelpark.


Lo malo que tiene ser tan común, es que a veces no se les hace justicia, y poco se les apunta con el objetivo. Pero que esta única foto sirva como testimonio de su presencia.


Paloma torcaz (Columba palumbus)

Paloma de gran tamaño, mayor que las cimarronas, y que suele tener un comportamiento más rural, siendo fácil verla a las afueras de las ciudades o en grandes parques. En España es bastante común, y el cableado contiguo a las autovías es una de sus atalayas preferidas donde otear el horizonte.

Muy reconocible por su mancha blanca en el cuello.



Urraca común (Pica pica)

Esta pícara ave también se dejó notar en nuestra visita, sobre todo en callejones poco transitados o en el parque Vondelpark. Al igual que el resto de córvidos, demuestra tener una gran inteligencia y, a mi parecer, es un emplumado realmente bonito con los tonos irisados de su plumaje.






Édam y Zaanse Schans, periferia rural de Ámsterdam.

De los pueblos cercanos a la capital, cabe destacar la belleza de Édam y Zaanse Schans.

El primero de ellos famoso por sus quesos, es un acogedor pueblo radiado, como no, de canales bordeados por casitas que parecen sacadas de un cuento. Es realmente bonito y con mil rincones donde perderte intencionadamente, sin duda una visita obligada para los turistas que visiten este país.

Mientras que Zaanse Schans, no es más que un "asentamiento temático" donde han recreado la vida rural de los Países Bajos, dando la oportunidad de visitar un molino, fabricar tus propios zuecos de la manera tradicional, o atiborrarte con sus exquisitos quesos y chocolate. Pese a ser un poco "artificial", al estar rodeado de infinitas praderas salpicadas de tradicionales molinos no decepciona a nadie.



Las aves que aquí pudimos ver son: Ánade azulón (Anas platyrhynchos), Ánade friso (Anas strepera), Ánsar común (Anser anser), Cisne vulgar (Cygnus olor), Estornino pinto (Sturnus vulgaris), Focha común (Fulica atra), Gallineta común (Gallinula chloropus), Garceta común (Egretta garzetta), Gaviota reidora (Croicocephalus ridibundus), Gorrión común (Passer domesticus), Grajilla occidental (Corvus monedula ssp spermologus), Paloma bravía (Columba livia) y Silbón europeo (Anas penelope).



Ánade friso (Anas strepera)


Las hembras son muy parecidas a las de Azulón, con la parte baja del pico anaranjado, y los machos son marrones, similares a las hembras pero de tonos más uniformes y con un tono negro en la parte trasera y cola. Eso si, la mejor forma de identificarlos es porque presentan el espejuelo blanco (en lugar de azul como los Ánades reales o azulones)

Foto testimonial de la presencia de esta especie, en esta imagen se ven algunos ejemplares tras un grupo de fochas.


Ánsar común (Anser anser)

Anátida de gran tamaño, primo salvaje de las domésticas ocas o gansos, al que le gusta pastar en prados abiertos. Difícil de identificar del resto de miembros de su familia pero, al no poseer un anillo blanco en la base del pico (descartamos careto y chico) y la mancha blanca que muchos tienen en la punta de este, que además es completamente naranja (descartamos campestre y piquicorto), me hacen decantarme claramente por el común.

Grupo de ánsares pastando.

En formación de vuelo.


Focha común (Fulica atra)

Las comunes Fochas, numerosas allá donde haya un humedal adecuado, y no son muy sibaritas. Pude verlas en todos los lugares que visité, siempre que hubiese una masa de agua cercana.



Gallineta común (Gallinula chloropus)

También conocida por el poco decoroso nombre de Polla de agua, la gallineta es un tímido rállido que pude ver en un desorbitado número en el parque Vondelpark de Ámsterdam, y ya de forma algo más normal y natural en Zaanse Schans.




Silbón europeo (Anas penelope)
Pude observar grandes grupos de estas aves en las zonas de pradera, cerca del agua. Reconocibles por varios rasgos, a destacar la cabeza marrón-rojizo con una banda anaranjada en plena frente de los machos adultos (en la foto se observa uno más o menos en el centro), además de la linea blanca en los flancos o ese "trasero" negro precedido de una zona blanca.


Recomiendo pulsar sobre la foto para ampliarla.




Volendam y Marken, volando sobre el mar.

Bañados por el Mar del Norte (realmente por una laguna formada por este, quedando atrapado entre diques), encontramos dos joyas, Volendam y Marken.

Volendam fue un auténtico descubrimiento, guardando la esencia de pueblo Holandés, sumada a la de zona pesquera. Sus casas eran unas maravillas, muy curiosa la arquitectura y las costumbres Neerlandesas, y ya al llegar al paseo marítimo caí enamorado, de su belleza y, como no, de sus pájaros, pues decenas de Estorninos pintos caminaban por el suelo tras los restos de los turistas, mientras un par de Garzas reales se acomodaban a pocos metros de mi, que no daba para más entre las Gaviotas reidoras y los Somormujos lavancos... Una autentica vorágine de aves.



Y de ahí fuimos a Marken, pero para llegar a este pueblo situado en la otra orilla, necesitábamos desplazarnos en barco, y aunque el trayecto no fue más allá de los 10 minutos, pude ampliar mi cota de especies con los Porrones moñudos y una Serreta grande. El pueblo en si era más bien una estancia de veraneo, sin mucho más que zonas residenciales y, por supuesto, canales. Aunque había poca animación, es un enclave precioso, como todos los visitados.

Las aves que aquí pudimos ver son: Ánade azulón (Anas platyrhynchos), Cisne vulgar (Cygnus olor), Estornino pinto (Sturnus vulgaris), Cormorán grande (Phalacrocorax carbo), Garceta común (Egretta garzetta), Garza real (Ardea cinerea), Gaviota reidora (Croicocephalus ridibundus), Gorrión común (Passer domesticus), Grajilla occidental (Corvus monedula ssp spermologus), Paloma bravía (Columba livia), Porrón moñudo (Aythya fuligula), Serreta grande (Mergus merganser) y Somormujo lavanco (Podiceps cristatus).



Estornino pinto (Sturnus vulgaris

Como bien comento arriba esta especie me sorprendió mucho, pues se comportaban casi como gorriones, andando entre las personas, subiéndose incluso a mesas ocupadas por comensales a los que intentaban robar algún pedacito. Eso me permitió hacer una foto donde se aprecia lo bello de su irisado plumaje.






Garza real (Ardea cinerea)

Aunque puse las fotos de este hermoso animal que pude realizar en la capital, aquí descubrí auténticos modelos, que posaron confiados ante mi objetivo.

Detalle de la cabeza de esta Garza.

Curiosa Garza me observaba mientras yo hacía lo propio.

Y me dejó tomas de su "real" caminar.

Además de un retrato donde se ven sus característicos flecos.




Gaviota reidora (Croicocephalus ridibundus)

Otra especie ya mencionada que se mostró realmente cercana en estos pueblos. Permitiéndome fotografiar ejemplares con edades y plumaje diferente.

Ejemplar de 1º invierno, con el pico y patas aún amarillos, así como plumaje juvenil.

Ejemplar adulto.

Adulto con la cabeza aún/ya manchada de negro, con indicios de la caperuza estival.

En este detalle de la cabeza podemos apreciar las manchas en invierno, viéndose siempre dos, una en el ojo y otra en la zona auricular.

Esta especie lleva a confusión con la Gaviota cabecinegra (Larus melanocephala), pero con diferencias como la tonalidad de la cabeza, siendo la caperuza más extensa en la cabecinegra, así como un negro más intenso. En invierno el "manchado" de la misma también es diferente, con las manchas descritas en la foto de arriba para la Reidora, y con un barrado único y extenso en la cabecinegra, desde el ojo hacía el cuello.

Además los adultos de cabecinegra no marcan el negro de las primarias cuando están posadas, es decir, no se ven plumas negras en la cola, mientras que en la reidora, como podemos ver en las fotos de arriba, sí.

Foto ilustrativa de las diferencias comentadas.



Porrón moñudo (Aythya fuligula)

Montado en el barco para viajar a Marken, me quise relajar con mi pareja, y para que las aves no se interpusieran en mi relación nos sentamos en una mesa dentro del mismo. Con lo que yo no contaba era con que el buque estaba rodeado de unos inmensos ventanales que dejaban ver todo lo que pasaba por nuestro lado, y fue ahí cuando apareció un hermoso Porrón moñudo, así que el momento de relax duró poco y me volví a ataviar con mi cámara para inmortalizar tan hermosa ave.




Poco que añadir al "por qué" se llama moñudo...



Serreta grande (Mergus merganser)

Ya no pude dejar de mirar por los ventanales, y muy lejos, entre las olas, un solo ejemplar de Serreta grande, un macho, que hizo que mereciera aún más la pena. Este "pato" tiene un característico pico que lo hace inconfundible.

La calidad de la foto es bastante mala, pero permite identificar la especie y el género.




Somormujo lavanco (Podiceps cristatus)

Por último pero no por ello menos importante, destacar la gran cantidad de Somormujos que pude ver, tanto en puerto como en el mar e incluso en los mismos canales. Eso sí, me costó sacarles una foto decente.






Conclusión.

El viaje no fue para ver aves, y aún así me fui con una inmensa cantidad de especies, y habiendo disfrutado de la ciudad, de sus costumbres y sus gentes, de su hermosa arquitectura y sus canales, de lo curioso del Barrio Rojo y lo tradicional de sus zuecos y molinos. En definitiva y sin intención de ser una guía de aves de Ámsterdam, animo a todo el que le guste viajar y/o las aves a visitar los Países Bajos, pues es un entorno tan único y rico que podrá observar aves sin necesitar largas salidas de campo u horas esperando sentado en un lugar propicio.

Sin duda alguna fue un viaje maravilloso en todos los aspectos, que pude además compartir con Elba, mi novia, que ejerció de fotógrafa personal, encargándose, entre otras cosas, de inmortalizar muchos de mis lances con la cámara; y por supuesto con las aves, mis "segundas novias", que me dejaron con ganas de más, por lo que no cierro la posibilidad de realizar un segundo artículo.

Espero que hayáis disfrutado leyéndolo tanto como yo compartiendo la hermosa fauna ornitológica de Ámsterdam y sus alrededores.




2 comentarios:

  1. Muchísimas gracias por publicar!!! Me voy a Amsterdam unos días y estaba buscando un poco que podía pajarear por allí… que ganas tengo de llegar a Volendam y (ojalá!) ver tanto como viste tu!! Gracias, has hecho una guía muy práctica! :) Diana

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    1. Buenas tardes Diana, gracias a ti por tu comentario. Ámsterdam me sorprendió gratamente, tiene una diversidad ornitológica muy rica sin salir de la ciudad y sus zonas turísticas, sus canales son extraordinarios y parques como Vondelpark son maravillosos. Volendam, saliendo ya de la urbe, es una maravilla porque ofrece una diversidad diferente. Espero que disfrutes de tu viaje y que tengas un buen pajareo!!

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